El despertar aromático comienza con notas verdes y frescas de artemisa, manzana y menta, esa primera brisa que te despierta con energía.

El corazón floral te seduce con acordes de jazmín y azahar, flores que parecen mecerse bajo la brisa cálida de una tarde mediterránea.

El final gourmet te abraza con clavel, bálsamo y vainilla, dejando un rastro cálido y envolvente que perdura delicadamente en tu piel.

No es un perfume intenso ni abrumador. Es esa fragancia exótica y soleada que hace que quienes te rodean se pregunten: "¿Qué es ese aroma tan especial?"

Hidratación que se siente, frescura que se respira

Más allá de su irresistible aroma, esta bruma corporal cuida de ti. Su formato spray libera una fina niebla que proporciona un efecto refrescante instantáneo, perfecto para esos días calurosos en los que tu piel pide un respiro.

¿El secreto de su capacidad hidratante? La glicerina vegetal orgánica que nutre tu piel desde la primera aplicación, evitando que se reseque por la exposición solar. Porque una piel hidratada no solo se ve mejor, también se siente radiante y cómoda.

Belleza responsable, tranquilidad absoluta

En Acorelle entienden que la cosmética natural no es solo una tendencia, es una responsabilidad. Por eso este body mist está formulado sin ftalatos, almizcles nitrados ni ingredientes agresivos. Una composición 100% de origen natural que respeta tu piel tanto como el planeta.

¿El resultado? Puedes perfumarte con total tranquilidad, incluso bajo el sol más intenso del verano. Segura, natural y efectiva... así debería ser toda la cosmética, ¿verdad?

Cómo disfrutarla al máximo

Aplicar este agua de verano es tan sencillo como placentero. Simplemente pulveriza sobre la piel limpia del cuerpo, manteniéndola a unos centímetros de distancia. Siente cómo la bruma se posa suavemente, dejándote delicadamente perfumada durante todo el día.

Úsala después de la ducha para empezar el día con energía, antes de salir a disfrutar del sol, o simplemente cuando necesites ese toque de frescura que te reconecta contigo misma. Es tu pequeño ritual de bienestar, tu momento de autocuidado entre el ajetreo diario.

Importante: Este producto no contiene protección solar. Recuerda siempre aplicar tu protector solar habitual antes de exponerte al sol.

Modo de Empleo

Agita suavemente el envase antes de usar. Pulveriza la bruma sobre la piel sana del cuerpo a una distancia de 15-20 cm, con movimientos envolventes. Evita el contacto directo con los ojos y mucosas. No aplicar sobre piel irritada o con heridas. Mantener fuera del alcance de los niños.

Para prolongar la fragancia, aplica también sobre el cabello con el envase alejado unos 30 cm. Puedes combinarla con otros productos de tu rutina corporal para potenciar la hidratación. Reaplica durante el día siempre que desees renovar la sensación de frescura.